12 Sep Preparativos para un vuelo en parapente

Antes de lanzarnos a la fascinante aventura de volar, todo vuelo en parapente requiere unos pasos y procedimientos previos que garantizan que la experiencia resulte como la hemos planteado, segura y satisfactoria.

Estos pasos comienzan el día antes del vuelo con el estudio de las condiciones meteorológicas y la valoración de las mismas con el objeto de asegurar que dichas condiciones son las idóneas para volar en parapente.

El día del vuelo, y alcanzado el punto de despegue, nos cercioramos de que las previsiones meteorológicas se cumplen, y emprendemos el siguiente paso ya en compañía de la pasajera o pasajero, con quien entablamos una charla informativa acerca de las singularidades del vuelo que vamos a realizar; qué tipo de vuelo vamos a desarrollar, qué paisajes vamos a contemplar, qué duración aproximada, alturas y distancias vamos a cubrir, etc., para continuar con unas breves indicaciones sobre cómo vamos a realizar la maniobra de despegue, y de qué manera la pasajera o pasajero nos ayudará en la ejecución de la misma.

El procedimiento no termina ahí. Ya con las impacientes ganas de dar el paso para volar, y una vez dispuesto el equipo de vuelo en su lugar, chequeados todos los elementos de seguridad del mismo, y pasajera/o y piloto “uniformados” con sus arneses y cascos, tiene lugar la comprobación definitiva de que los elementos de seguridad están dispuestos convenientemente y que todo está en su sitio, labor que supervisa por un tercer miembro del equipo, para asegurarnos de que nada se pase por alto, salvo nosotros, después de despegar, que sí pasaremos muy alto.